Ilse Aichinger: Das FenstertheaterD

Ilse Aichinger: Das Fenstertheater
Die Frau lehnte am Fenster und sah hinüber. Der Wind trieb in leichten Stößen vom Fluss herauf und brachte nichts Neues. Die Frau hatte den starren Blick neugieriger Leute, die unersättlich sind. Es hatte ihr noch niemand den Gefallen getan, vor ihrem Haus niedergefahren zu werden. Außerdem wohnte sie im vorletzten Stock, die Straße lag zu tief unten. Der Lärm rauschte nur mehr leicht herauf. Alles lag zu tief unten. Als sie sich eben vom Fenster abwenden wollte, bemerkte sie, dass der Alte gegenüber Licht angedreht hatte. Da es noch ganz hell war, blieb dieses Licht für sich und machte den merkwürdigen Eindruck, den aufflammende Straßenlaternen unter der Sonne machen. Als hätte einer an seinen Fenstern die Kerzen angesteckt, noch ehe die Prozession die Kirche verlassen hat. Die Frau blieb am Fenster.

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Ilse Aichinger: El Teatro Ventana
La mujer se apoyó en la ventana y miró por encima. El viento soplaba en impactos menores desde el río y trajo nada nuevo. La mujer tenía la mirada de los curiosos que son insaciables. Había nunca te ha hecho el favor de ser establecido en el frente de su casa. También vivían en el penúltimo piso, la calle era demasiado profunda a continuación. El ruido rugió sólo ligeramente hacia arriba. Todo era demasiado profunda a continuación. Cuando estaba a punto de dar la espalda a la ventana, se dio cuenta de que el anciano había encendido la luz. Como todavía era bastante luz, esta luz se mantuvo en e hizo la extraña impresión, realice las farolas encendidas en el sol. Como si un enchufado en sus ventanas las velas, antes de la procesión salió de la iglesia. La mujer permaneció en la ventana.

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Ilse Aichinger: el Fenstertheater
la mujer rechazó el las ventanas y preveía encima. El viento ha incrementado este esfuerzo en ligero impactos de Río y trajo consigo un nada nuevo. La señora tuvo la mirada puesta neugieriger rígido, la gente unersättlich. Se le había caído aún nadie ha hecho, antes de su casa niedergefahren. Por otra parte que asistió en el penúltimo stock, la calle era demasiado profunda abajo.El ruido rauschte sólo un más fácil. Todo era demasiado profunda abajo. Como usted se refiere precisamente quería dar la espalda de ventanas, señaló que el viejo a la luz angedreht tenía. Dado que aún era muy hell, mantuvo esa luz para ellos y demostró la extraña impresión que ante Straßenlaternen bajo el sol. Como si hubiera una de sus ventanas las velas partir,Antes de que la así la iglesia ha abandonado. La señora permaneció en las ventanas.